Sin miedo: Defender la democracia desde la democracia: Un ex ministro colombiano y vicepresidente de PRISA presenta su libro en la Casa América de Madrid.
Fernando Carrillo Flórez, en la presentación de su libro, este jueves en la Casa de América de Madrid. Santi BurgosEn las elecciones legislativas de 1990 de una Colombia sumida en la violencia y con la tasa de homicidios más alta del mundo, a las seis papeletas previstas para elegir los cargos públicos correspondientes se añadió, extraoficialmente, una más. La llamada «última papeleta» -liderada por estudiantes y difundida por las calles del país- proponía la creación de una Asamblea Constituyente para reformar la Constitución, vigente desde 1886. Aunque nunca se supo el número de personas que depositaron esa séptima papeleta en las urnas, el objetivo de ese voto alternativo se cumplió. Dos meses después, en las elecciones presidenciales, más de cinco millones de colombianos -alrededor del 86% de los que acudieron a las urnas- votaron, en una consulta vinculante, por la Asamblea, que un año después reformó la Constitución del país. Uno de los promotores de aquella consulta y que luego se convirtió en uno de los 70 constituyentes con voz y voto de aquel selecto grupo fue Fernando Carrillo Flórez, exprocurador y exministro de Colombia y vicepresidente de PRISA, el grupo editor de EL PAÍS. Y fue precisamente el recuerdo de aquel episodio una de las principales motivaciones que le impulsaron a escribir su nuevo libro Sin miedo: Defender la democracia desde la democracia (Debate), que presentó este jueves en la Casa América de Madrid. Más informaciónQue no cunda el pánico, ¿verdad? «A nuestra generación le tocó vivir los acontecimientos más violentos y dramáticos de los últimos años en Colombia. Vivíamos en un Estado fallido y eso empezó a cambiar. Hicimos una de las constituciones más progresistas de América Latina y llevamos a Colombia a la modernidad política», ha recordado Carrillo en una charla con el director de W Radio Colombia, Julio Sánchez Cristo, en el acto de presentación al que también ha asistido la directora de este diario, Pepa Bueno. Pero tras lo que el autor considera «una epifanía, un paréntesis mágico que nadie esperaba», la degradación democrática en su país no se ha detenido. «La política se convirtió en lo mismo y empezó a fracasar», reconoce el ex ministro. En el libro que ha presentado, hace un diagnóstico de las amenazas actuales e intenta encontrar algunas soluciones. El ex ministro colombiano y vicepresidente de PRISA Fernando Carrillo Flórez (izquierda), en la presentación de su libro en la Casa de América de Madrid, junto a Julio Sánchez Cristo, director de W Radio Colombia. Santi BurgosDe estos problemas, dijo, los que más le preocupan son la polarización y el extremismo. «Las redes lo que hacen es promover la confrontación, y esa es la mayor amenaza para la democracia. Intentan convencernos de que es un problema de izquierdas contra derechas», dijo Carrillo. Esto, unido al debilitamiento de las instituciones y a la prolongada corrupción, ha conseguido, según el autor del libro, aumentar las narrativas populistas que erosionan la confianza en la democracia. «Ahora se tolera el autoritarismo y en realidad la responsabilidad no es de la democracia, hay que pasársela a la política, a los malos políticos», dijo. El ex ministro ha identificado la desinformación como la principal causa de la polarización en la que se vive y, por ello, lo que más ha defendido durante el acto es el valor del periodismo de calidad en la lucha contra las noticias falsas. «El termómetro de la calidad democrática es el buen periodismo. Es la primera línea de defensa de la democracia. Eso lo saben los autoritarios globales y por eso le disparan», dijo al final de su conversación con Sánchez Cristo. Lo que ocurre en Colombia, según explicó el director de W Radio, es objeto de una profunda reflexión en su libro, y sirve de ejemplo para el resto de naciones latinoamericanas. Donde dice Colombia en el libro, «cambia el nombre por el de cualquier otro país de la región y lo vende por todas partes», ha sugerido Sánchez Cristo al autor del ensayo antes de insinuar al rechazo entre risas de Carrillo, que se discute en algunos ámbitos de la política colombiana: «¿No estamos escuchando las palabras de un candidato presidencial»? En la presentación de su libro en Casa de América, el ex ministro colombiano y vicepresidente de PRISA, Fernando Carrillo Flórez, en Madrid. Tras la conversación entre Carrillo y Sánchez Cristo, con un panel de democracia global y América Latina moderado por la Cadena Ser y colaboradora de esta revista, Aida Bao, y con la participación de Erika Rodrguez, directora de la Fundación Carolina, Narciso Casado Una charla que ha profundizado en los retos democráticos, con las perspectivas de cada uno de los sectores que los tertulianos representaban y enlazando las ideas del libro con la actualidad española y latinoamericana. En nuestro boletín semanal, los mejores críticos evalúan las mejores obras literarias.
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En las elecciones legislativas de 1990 de una Colombia sumida en la violencia y con la tasa de homicidios más alta del mundo, a las seis papeletas previstas para elegir a los cargos públicos correspondientes se añadió, extraoficialmente, una más. La llamada «última papeleta» -liderada por los estudiantes y difundida por las calles del país- proponía la creación de una Asamblea Constituyente para reformar la Constitución, vigente desde 1886. El objetivo de esa votación alternativa se hizo realidad, a pesar de que nunca se conoció el número de personas que depositaron esa séptima papeleta en las urnas. Dos meses después, en las elecciones presidenciales, más de cinco millones de colombianos -alrededor del 86% de los que acudieron a las urnas- votaron, en una consulta vinculante, por la Asamblea, que un año después reformó la Constitución del país. Fernando Carrillo Flórez, exprocurador y exministro de Colombia y vicepresidente de PRISA, el grupo editor de EL PAS, fue uno de los promotores de esa papeleta y posteriormente se convirtió en uno de los 70 constituyentes con voz y voto de ese selecto grupo. Defender la democracia desde la democracia (Debate), que presentó este jueves en la Casa América de Madrid, fue precisamente una de las principales motivaciones que le llevaron a escribir su nuevo libro Sin miedo.
